- Azufre: alimentos proteicos, en especial semillas de sésamo, lino, mijo y champiñones. Forma parte del pelo y las uñas y facilita la depuración del hígado.
- Selenio: ostras, bogavante, carnes, pescado, huevos, cereales integrales, cebolla y germen de trigo. Tiene un importante papel antioxidante, pues está ligado a enzimas que neutralizan radicales libres.
- Silicio: cerveza, granos no refinados y cola de caballo triturada. Promueve la síntesis de colágeno.
- Vitamina A: como provitamina en calabaza, zanahoria, brócoli, acelga, espinaca, perejil, albaricoque, cerezas, melón y alga Nori. Como vitamina en hígado, grasa de pescado, yema de huevo y mantequilla. Mantiene el funcionamiento de la piel, el pelo y las mucosas. Los complementos alimenticios con esta vitamina no deben ser tomados por embarazadas.
- Vitaminas del grupo B:
- B1 pipas, germen de trigo, piñones
- B2 levadura de pan, levadura de cerveza, cereales integrales, leche, carne, huevos
- B3 cereales integrales, levadura de cerveza y la producen las bacterias intestinales
- B5 en casi todos los alimentos
- B6 levaduras, cereales integrales, frutos secos, legumbres
- B8 levaduras, cereales integrales, huevos, soja
- B9 vegetales de hoja, algunas frutas, huevos y leche
- B12 en forma de provitamina en vegetales fermentados (miso, tamari, picles), algas, en forma de vitamina en arenque, caballa y huevos. El hígado* contiene casi todas las del grupo B incluida la 12.
- Vitamina C: acerola, escaramujo, kiwi, moras, alfalfa, perejil, pimiento verde, coles, brócoli, limón, naranja en menor proporción. No cocinar estos alimentos a altas temperaturas porque esta vitamina es sensible al calor, además se disuelve fácilmente en el agua de cocción y es también sensible al oxígeno y la luz. Esta vitamina es antioxidante.
- Vitamina E: aceite de germen de trigo, aceites vegetales de primera prensión en frío, en gérmenes de semillas y en menor medida semillas y frutos secos. Es antioxidante, protegiendo a las células de radicales libres, además interviene en el sistema inmune y ayuda a la circulación sanguínea.
- Zinc: carnes, pescado, mariscos, germen de trigo, semillas sobretodo de sésamo, y cereales integrales. Interviene en el sistema inmune.
*Si bien el hígado es buena fuente de vitaminas de este grupo, como de muchos otros nutrientes, es un órgano que acumula tóxicos, por esta razón recomiendo evitarlo y buscar otras fuentes más convenientes.
- La fibra alimenticia es necesaria para el normal funcionamiento intestinal, del cual depende la salud del resto del organismo y también de la piel. Es necesario tomarla de forma natural, no como salvado, o “gomas” adicionados a los alimentos “enriquecidos con fibra”. Es mejor comerlas como parte integral de los alimentos, dentro de los cuales tenemos los cereales de grano integral (íntegro), semillas, legumbres, verduras y hortalizas y frutas con piel.
- La levadura de cerveza es un alimento muy interesante, rico en vitaminas del grupo B (menos B12), por lo que es muy útil para aliviar problemas de la piel, pero no hay que abusar pues es un alimento muy concentrado.
- Las crucíferas, como las coles, brócoli, coliflor, y repollo; preferirlas en cocciones a temperaturas moderadas (al vapor). Ajo, cebolla, endibia, escarola, diente de león, rábanos y nueces en ensaladas. Las alcachofas son depurativas, del mismo modo que el agua de su cocción.
- Frutas de estación, sobre todo en verano, preferiblemente por la mañana o entre comidas. Una buena opción es antes de comer.
- Infusiones depurativas: diente de león, cardo mariano, borraja, boldo.
Alimentos a moderar:
- Trigo y maíz, no es necesario excluirlos de nuestra dieta pero podemos variar e incluir: mijo, quinoa, trigo cerraceno, avena, cebada, arroz…
- Sal, en el caso de tomarla que sea marina sin refinar. Cuando cocinamos al vapor las verduras mantienen los minerales y no es necesario agregar demasiada sal para realzar el sabor.
- Leche y quesos curados. Preferir yogur natural y quesos blancos, son más digeribles.
- Aceites refinados, por ser extraídos mediante elevadas temperaturas que alteran su estructura, y por la adición de solventes para el proceso de desodorización. Los solventes se extraen pero no completamente.
- Azúcares y harinas refinadas. Bollería industrial. Preferir el azúcar integral y las melazas (con moderación), y las harinas de cereales de grano entero. Se puede endulzar los postres con fruta desecada.
- Carnes rojas. En caso de consumirlas que sean magras, de buena calidad, y de forma esporádica. Preferir carnes blancas; evitar embutidos y vísceras.
- Café, té negro, chocolate y bebidas cola.
- Alimentos muy procesados, con cocciones prolongadas a altas temperaturas, o con aditivos artificiales.
Colaboradora de Tutallernatural.com