¿Por qué elaborar nuestra propia cosmética?

Las razones son varias, aunque quizás la más destacable sea por el placer de cuidarnos y mimarnos con unos productos elaborados por nosotros, de una forma sana y segura. Además, al elegir los productos nos aseguramos de la calidad final del producto y de sus indudables beneficios.

En principio puede parecer difícil, pero resulta sorprendente cuando uno se lanza en esta aventura, comprobar lo sencillo que es. En realidad, una crema no es más que agua, aceite y un emulsionante para ligar las dos fases. A partir de aquí se pueden añadir una infinidad de cosas según las necesidades de nuestra piel. Uno de los factores más importantes a la hora de elaborar nuestra propia cosmética es la elección de nuestra materia prima. Es primordial elegir unos productos de calidad y con todas las garantías. Tendremos especial cuidado con los productos a granel o con etiquetas dudosas ya que estos no nos proporcionan ninguna garantía. Es importante que nuestro aceite vegetal sea de primera presión en frío para, de este modo, beneficiarse de todas sus propiedades; o que el aceite esencial sea 100% puro, natural y bioquímicamente definido. Para utilizar adecuadamente los aceites esenciales es muy importante conocer cuáles son beneficiosos para nuestra piel, respetar las dosis y leer bien las contraindicaciones antes de usarlos. 

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